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Se respiraba aire de emoción y orgullo en el ambiente mientras familias, amigos, antiguos alumnos y docentes se reunían para celebrar un logro muy importante en la vida de nuestros estudiantes
El viernes 23 de mayo de 2025, nuestro colegio celebró una emotiva ceremonia de graduación con vistas al hermoso mar Mediterráneo, marcando el cierre de una etapa y el inicio de otra.
Este evento fue la ocasión perfecta para reunir a toda la comunidad y poder compartir juntos un momento para reflexionar sobre los logros y el crecimiento de la promoción que se despide. A lo largo de la ceremonia se percibió un fuerte sentimiento de orgullo, superación y esperanza hacia el futuro.
Uno de los momentos más especiales fue protagonizado por los discursos de algunos de nuestros estudiantes más brillantes. En representación del grupo de IB, Mar F. y Emma N. compartieron reflexiones sinceras sobre los retos superados y el aprendizaje de los últimos años, reconociendo que "tal vez no siempre nos sentimos fuertes, pero nunca nos rendimos."
Por parte del grupo de Bachillerato Nacional, Ona P. y Júlia P. ofrecieron unas palabras llenas de emoción que celebraron los recuerdos compartidos y la fuerza de su comunidad. Cada discurso reflejó el espíritu de resiliencia, unión y esperanza que define a esta promoción, dejando una huella en todos los presentes. Como ellas expresaron con tanta belleza: "Dicen que lo mejor esta por venir pero antes de mirar hacia delante, nos quedamos un segundo mas aquí - en este momento, con estas personas, con todo lo que hemos vivido.”
Nuestra directora, Sarah Osborne-James, compartió unas palabras llenas de inspiración sobre la importancia de salir de la zona de confort y afrontar nuevos retos como parte esencial del crecimiento personal. En su mensaje a los graduados, los animó a: "Salgan ahí fuera y dejen su huella. Sean valientes, sean brillantes, pero sobre todo, sean amables."
Sus palabras fueron un poderoso recordatorio de los valores que han guiado a esta generación y del profundo orgullo que sentimos por todo lo que han logrado. “Estamos increíblemente orgullosos de vosotros”, dijo, “y no podemos esperar a ver el impacto que tendrán en el mundo.”
Uno de los momentos más conmovedores de la ceremonia llegó cuando los graduados subieron al escenario para recibir sus diplomas. Cada paso fue acompañado de aplausos, sonrisas y una emoción compartida que celebraba no solo el logro académico, sino todo el camino recorrido para llegar allí. Ver a los estudiantes con sus togas y birretes, preparados para afrontar lo que viene, fue una imagen verdaderamente inspiradora y un testimonio de su compromiso y del futuro prometedor que les espera.
Aunque su etapa en Hamelin-Laie llega a su fin, sabemos que los lazos creados aquí perdurarán en el tiempo. Felicitamos a nuestros graduados y les deseamos mucho éxito y felicidad en esta nueva etapa. Esta ceremonia marcó el cierre de un capítulo, pero también el emocionante comienzo de muchas nuevas aventuras.